quien pinta las puestas de sol
tiñendo el cielo de púrpura y magenta
debe hacerlo recostado en la linea imaginaria
que separa el cielo del mar
y las nubes de los árboles
aquel que embellece nuestro techo infinito
y lo difumina de calores y colores
no es consciente de que
aquellos que contemplan su obra
lo hacen al calor de un abrazo,
dejando escapar emoción líquida del lagrimal
y se reconfortan con la vida un poco más
si supiera valorar el alcance de sus trazos
seguro que haría puestas más y más largas
o quizá contrataría algun duende
que sujetara en vilo al sol un ratito más
4 comentarios:
Quien no se ha emocionado y ha llorado en una puesta de sol...ojala pudieramos poner la mano debajo del sol y sujetarlo unos minutitos mas en el horizonte...que tendrá la puesta de sol que le deja a uno atontado mirandola...y mas si es con ese abrazo deseado...con esas palabras mágicas esperadas de la persona amada...señorita Berenice, usted logra sorprenderme siempre con cada poema...
Y la hermosura de la foto, de tus palabras, de los sentimientos que albergas de las emociones contenidas que se suicidan detras de cada coma.
Sin palabras.
Precioso!
Mua.
llevo un tiempo desconectado, es reconfortante volver a según que blogs..
que suerte tener el pelo del color de la puesta de sol...como usted me dice Sta. Berenice...y que delicia darse un baño de esta...cuando uno ama...
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