veloz el tiempo vuela.
La misma flor que hoy admiráis,
mañana estará muerta..."
Uno se siente Gregorio Samsa a veces
recien despierto
y embriagado de cambios
que no se aciertan a comprender.
Hay momentos en la vida;
puntos de inflexión
o giros en el camino
en que nos crecen las alas,
nos salen colmillos
o se nos endurece el caparazón.
Ahora sé
que esas metamorfosis son necesarias
aunque nos convirtamos en cucarachas
o en mariposas,
ya seamos aves
o arañas peludas.
Cada alteración
nos demuestra que estamos vivos
que no yacemos inmóviles en un rincón
y que, aunque buscamos que así sea
de vez en cuando
el rincón se agita y se voltea
convirtiéndose en esquina
para dejarnos a la intemperie
bien a la vista de la metarmofosis
que nos espera.
¿Qué es la vida? me preguntas,
y sin saber como explicar
me desvío y desvarío
sin pensar.
“Es la vida una invasión
de días y respiraciones,
una espiral de momentos
que nos colocan y descolocan
en cada palpitar.
...O es quizá algo a medias
entre dolor y placer,
una persecución de uno mismo
que entretiene y no se detiene
hasta llegar a perecer...”
¿Qué es la vida? me preguntas,
tu que vienes a arrebatármela
que la quebrantas y detienes
en un punto final.
¿Qué es la vida, muerte impúdica?
Solo lucha
y resistencia a tu mirar.
Siempre tu;
serena locura y
confidente paralela,
me enseñaste
que el negro es el color de la esperanza
y que la mejor compañía
no necesita de requisitos ni condiciones,
que lo importante a veces soy yo misma
y que la distancia y el silencio no llevan al olvido
Siempre tu;
dama de noche lunar que apoya,
fortalece y abriga
me enseñas cada día
que siempre hay a quien le importas,
o algo por lo que luchar
y que mis alas son de una plata viva
aunque no siempre me eleven
lejos de la melancolía.
Gracias por estar ahi
por lo que me enseñas
y sobre todo
por ser siempre tu
... gracias Horrified
Cuando nací
mi cabeza y mi corazón se hallaban próximos,
tan próximos
que era imposible distinguirlos.
No acertaba a saber
si sentía lo que pensaba
o pensaba lo que sentía.
Para no confundir los latidos
con los devaneos de alguna neurona loca
acercaba la cabeza al pecho
y me quedaba oyendo
los bombeos de mi corazón ligero
tic tac tic tac...
Era fabuloso poder
ir de aquí a allá
huyendo de la sensatez
con mi cabeza y mi corazón unidos.
Pero el tiempo me cambió,
mi cuerpo fue creciendo,
mi cuello se irguió
para alejar mi cabeza de mi corazón.
Ahora los sentimientos y la razón
no se conocen,
por razones de altura
dejaron de mezclarse.
Muchas gracias vecina... y enhorabuena por el programa.
Folio atlántico escrito en pólvora
que enciende y ciega al que lee,
que vacía y apaga al que escribe
Pliego de amores y desamores
sonado de silencio a gritos
y apagado de luces en sombra
Este es mi espacio;
mi rincón de sueños y realidades
de contradicciones y rigores poéticos
Y este es también
tu hueco en mi armario,
sombra inhundada de luces
y perchas de las que descolgar versos
Acomoda tus pupilas
instálate con calma
mientras tanto...
despertaré mis vocales
ahogaré mis fantasmas
y desnudaré mi alma.
Quien carga con peso en el alma
o quien camina con la cabeza quebrada
tiene dificultad para poder
estimar el tamaño real
del peso o el quebranto
que aguanta
Cuando se camina cargado
arrastrando los pies y la mirada
se pierde la noción del peso,
porque todo pesa demasiado
y todo es demasiado grande
Lo único que disminuye
y se reduce hasta desaparecer
es el porteador mismo
que deseoso de soltar lastre
no ve el momento
en que abandonar su carga
Construiremos castillos de arena
tan sólidos
como el agua
Os toca...
Los ojos llenos de palabras
y las palabras llenas de esperanzas
La garganta llena de silencios
y los silencios llenos de ilusiones
Las manos llenas de caricias
y las caricias perdidas en mis faldas
Los pies llenos de caminos
y los caminos llenos de soles
tengo...
y soy;
palabras de esperanza,
silencios de ilusiones y
caricias perdidas.
Agarra lo que tengas viajero
sujeta lo que eres
y acompáñame
en mi camino de soles
Mi cuerpo es una jaula
con vistas al mar,
y aunque
sus bisagras o la puerta
anden desencajadas a veces
no siempre importa
porque el ave que la habita
sabe morir cada día
y renacer en cada sueño
sabe llenar sus ojos de olas y estrellas
de horizontes despejados
y amplios cielos en los que volar
Y aunque no siempre pueda
salir y planear
nunca olvida
que sus alas nacieron para desplegarse
y que de su cuello pende
la llave de su libertad