A veces me pregunto si cada momento que vivimos no es mas que la preparación del siguiente, sino existen las casualidades y realmente todo tiene algún sentido.
El caso es que este año he tenido varios percances con el coche, el último hace apenas horas, un sábado de vuelta a casa después de una fiesta. Sin embargo, esta ha sido la primera vez que el airbag saltó... el olor a quemado, la perdida de control, el sabor del miedo y la sensación de derrota no se borrarán de mi mente.
Lo único que puedo decir es que afortunadamente sigo aquí, y que quizá nada ocurra por casualidad.
4 comentarios:
Nena ¿estás bien?. Conozco esa sensación de vértigo... pero creo que al fin y al cabo acaban siendo muestras de nuevas oportunidades. Siempre quedan oportunidades.
Un beso
Estoy, magullada, con arañazos, la nariz morada y con collarin de nuevo, pero nada grave.
Espero impaciente todas las nuevas y buenas oportunidades..
Un besazo
Quizás sea cierto eso de que cada momento no más que una preparación para el siguiente. Quedémonos con que algunos momentos, aunque indeseados, nos brindan una experiencia irrepetible que en todo caso nos ha de hacer más o mejor persona.
A veces hay que luchar contra la inercia de nuestro instinto, que rechaza el todo por la parte. No renuncies a cojer el coche Sonia, que esta experiencia no te limite, ánimo.
Acabo de intentar cogerlo, uno viejo que esta en casa... y no arranca!!!! por dios, creo que miedo a cogerlo no tengo.. ya tengo mono de conducir.. jeje
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